Abdominoplastia y obesidad
La abdominoplastia o dermolipectomía abdominal consiste en la resección de un segmento de piel y grasa abdominal al mismo tiempo que se restaura la tensión normal de la pared muscular.
La abdominoplastia es una de las intervenciones estéticas que más desazón causa al cirujano estético por las grandes dimensiones de la cicatriz y al mismo tiempo, es una de las que más satisfacen a las/los pacientes por el cambio importante que determina en su silueta Frecuentemente se combina con la lipoescultura de aquellos acúmulos de grasa que no se disminuyen con el adelgazamiento (ver Lipoabdominoplastia).
Como en la preparación de cualquier cirugía es necesario realizar una exploración completa para descartar cualquier tipo de patología que pudiera contraindicar el acto quirúrgico. Dentro de estas cabe destacar los problemas cardiovasculares, pulmonares y de la coagulación.
En los pacientes obesos se recomienda, siempre que sea posible, el adelgazamiento previo mediante un control por el endocrinólogo. En el caso de pacientes que resisten el adelgazamiento y presentan un abdomen de grandes dimensiones puede estar indicada la cirugía, siendo aconsejable la preparación de la pared abdominal unos días antes de la intervención mediante la realización de ejercicios respiratorios.
Debido a la gran extensión del despegamiento y a las dimensiones del colgajo que normalmente se practica en este tipo de intervenciones es importante que los pacientes fumadores dejen de hacerlo durante unas dos semanas antes de la operación. La razón de esto es que el tabaco ocasiona una alteración de la microcirculación que puede comprometer gravemente el resultado final.